Un día aparentemente normal. Salgo de mi casa y de dirijo hacia la universidad. Tardo aproximadamente 45 minutos en llegar. Voy a la clase de Sistemas, entro al aula y me siento en mi puesto correspondiente. A mi lado se sienta una chica. Ella tiene el cabello negro, y su cara es muy linda, aunque ella es algo gordita. Como sea, no presto mucha atención al asunto. La clase termina y salgo del aula, luego voy a las demas clases y finalmente, a mi casa de nuevo.
Extrañamente en todo el trayecto hacia mi casa no dejo de pensar en esa chica medio gorda. Llego a mi casa, y me echo a dormir. Me levanto y me encuentro solo en mi casa, solo me acompaña mi hermana menor, que tiene como 8 años.
Estoy encerrado en mi habitación sentado frente al computador, y de nuevo la gordita se me mete al pensamiento, no puedo dejar de pensar en ella. Cierro lo ojos y la imagino, imagino que viene hacia mi con sus enormes senos al aire, me besa, toma mi pene en asta y lo mete entre sus grandes tetas y con ellas empieza a masturbarme (lo que llaman la "paja rusa"), yo no puedo aguantar mucho tiempo en ese estado y termino liberando un salvaje orgarsmo en su cara. Ella se relame con placer, tragando toda mi savia.
Abro los ojos, despertando de aquel sueño, mis pensamientos han logrado excitarme un poco, asi que me despojo de mi pantalon. Observo mi pene, completamente erecto. Entonces lo empiezo a frotar de arriba abajo, una y otra vez. Inicialmente mi intencion no era masturbarme, solo estaba acariciando suavemente mi miembro, pero hubo un momento en que ya no podía parar, e inconcientemente aumentaba el ritmo de mi mano, que solo se detuvo al momento del orgasmo, pero ya era tarde, mi pene ha empezado a liberar cantidades abundantes de semen. Por Satán...yo estaba en un éxtasis total, aquel gran orgasmo me duró como 5 segundos, y solo podía pensar en recibir todo ese semen con las manos, para no manchar nada.
Desde mi habitación le grito a mi hermana que me traiga un poco de papel del baño, obviamente yo estaba encerrado bajo llave, entonces le dije a mi hermana que pasara el papel por debajo de la puerta. Asi lo hizo, entonces limpié todo lo que había derramado mi amigote.
Con tan brutal orgasmo mis ansias se debieron haber calmado...pero no fue así, yo querías mas, y mas. Una vez limpié todo, me desnudé del todo, y comencé a masturbarme de una manera distinta: acostado en mi cama, moviento la cadera simulando una penetración y abrazando y besando una almohada grande, pues estaba fantaseando con mi gordita.
El placer que sentía era inigualable.
"eso es mi gordita, muevete, muevete así, así. Te gusta, ¿verdad?, pues a mi también... si, si siiii.....me vuelves loco, mi gordita ....siiiiiiiiii " decía yo para mis adentros.
El segundo orgasmo no se hizo esperar, un poco menos intenso que el anterior, pero igualmente delicioso. Me he masturbado miles de veces, pero pocas como ésta. Terminé y me vestí nuevamente. Finalmente he calmado mi satiria... solo un poco.
Ahora, escribiendo me excitado mucho, con solo recordar aquel momento. Ahora me dirijo al baño a consentirme un poco, y lo mas probable, a dar lugar a un tercer orgasmo.
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